Aldo Graziani, sommelier, referente local del mundo del vino, autor de guías, conductor de programas de radio, columnista en medios especializados, querido por todo el mundo, abrió hace cinco años este espacio que transmite la pasión que las bodegas, bodegueros y enólogos demuestran en su lugar de origen.
Una nutrida vinoteca con marco de restaurante y más de 500 etiquetas argentinas a precio de mostrador, para consumir adentro, llevar o probar por copas en cualquier momento del día. La estantería espejada que recorre el contorno del local es una carta de vinos en sí misma, lista para curiosear la variedad de regiones, estilos, etiquetas. Todas tienen su razón de ser en este ambiente que tienta a quedarse. En Aldo’s impera un look porteño con aire internacional de gran ciudad que contagia una buena energía, la misma que caracteriza a su dueño, un melómano empeñado en que aquí se escuchen buenas canciones de todos los tiempos. La música se extiende hacia el subsuelo donde Aldo montó Bebop, el mejor club de jazz de Buenos Aires, por el que desfilan desde capos como Pipi Piazzolla y su grupo Escalandrum, hasta pibes talentosos, como los de Bop, el jazzero solitario.
La apuesta gastronómica de Aldo’s fue tomando forma a lo largo de los años y ahora está en su hora clave, con el cocinero Maximiliano Matsumoto al frente de la cocina. Además de la opción de comer a la carta, está el menú de seis pasos que es un concentrado de aciertos: foie de aves con un pan de especias; langostinos de Madryn con aceite de apio y crema de yogur, una frescura perfecta para este marisco. Como principales, una cremosa polenta blanca de Colonia Caroya con huevo y kale; pesca blanca con bock choy, shitakes y dashi de panceta ahumada –una delicadeza que delata el origen de este chef–; cabrito de La Pampa confit con pasta de uvas pasas y puré de papas. A los postres, un sorbete de tomate –elaborado con tomates de Finca Isis– demuestra la sensibilidad de Matsumoto. Acompañan el menú tintos y blancos elegidos especialmente cada plato y servidos a la temperatura ideal. Aldo’s garantiza buena gastronomía y una lista infinita de etiquetas para elegir. El vino copa la parada.
Moreno 372. CABA. 5291-2380. Abierto todos los días. Sábado, sólo noche. Al mediodía hay un menú de tres pasos a $270 y a $300 con vino. Precios: amables.