Después de 10 años de elaboración en la bodega, llegó el espumoso más esperado del año –Cruzat Millésime 2006–. Un corte de 85% Pinot Noir y 15% de Chardonnay de Valle de Uco, producto de una extraordinaria cosecha. “El desarrollo de un espumoso lleva tiempo y mucha paciencia”, dice Pedro Rosell, alguien que de esto sabe como pocos. La cava de Roux fue el lugar elegido para degustar este excepcional vino, acompañado con ostras, un arroz marinero y otras delicias a cargo de Martín Rebaudino. Cada una de las diez mil botellas disponibles cuesta $900.