La calidad del aceite de oliva es un factor clave que define un plato. El tipo de aceituna, el clima, el suelo y el lugar de cultivo, la tecnología aplicada y demás cuidados que se administran durante la producción influyen en el resultado que finalmente queda encerrado en la botella.
En este sentido trabajan Olivícola Laur y Acetaia Millán, empresas líderes en la industria a nivel nacional e internacional. Con una producción de 450 mil botellas de aceite de oliva y 250 mil de aceto al año, sus estándares de calidad permitieron que sus productos sean galardonados en nuestro país y el mundo.

Fundada en 1906 por Don Francisco Laur, inmigrante francés, quien se afincó en Cruz de Piedra, Maipú, a principios del 1900. En 2010 fue adquirida por la familia Millán (Bodega Los Toneles, Mosquita Muerta Wines, Atomo Supermercados) y se inició un proceso de innovación tecnológica con la incorporación de modernas maquinarias de extracción de aceite de oliva, lo que produjo un notable incremento en la productividad a la vez que se mantuvo una alta calidad en los productos.

Productos: Olivícola Laur produce los aceites de oliva Clásico Extra Virgen, Blend de Terroir Cruz de Piedra, Blend de Terroir Altos Limpios y Blend de Terroir Medrano, y Gran Mendoza Premium. Además, acaba de lanzar Contraviento, aceite de oliva virgen extra sólo disponible en supermercados Átomo (Mendoza). A su vez, Acetaia Millán elabora aceto balsámico Laur y aceto balsámico Millán.

Turismo: Las puertas de Olivícola Laur están abiertas al público, para que los visitantes puedan conocer los secretos de elaboración, su historia y degustar sus productos.

Turismo Olivícola Laur
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E-mail: turismo@olvlaur.com

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