
Chateau Changyu Moser XV, llega desde Ningxia, una de las regiones vitivinícolas chinas más aclamadas. Con una distribución mundial de 14 Chateau y 21 bodegas, CHANGYU la empresa china de mayor distribución en el ámbito vinícola mundial, desembarca en nuestro país en alianza con la bodega argentina San Huberto.
a bodega argentina San Huberto y la bodega china Changyu Pioneer Wine Company fortelecen su vínculo comercial iniciado hace ya 20 años. Desde el año 2002 Changyu importa y vende en China los vinos argentinos de la bodega San Huberto. Changyu es hoy en día la bodega con mayor venta y distribución en China. Desembarca en Argentina, de la mano de Bodegas San Huberto, quien produce vinos en Argentina y los distribuye en ambos países. Su gran ejemplar “Château Changyu Moser XV 2017”, es un varietal de Cabernet Sauvignon, fiel reflejo de la cepa tinta más utilizada para la elaboración de vinos en China.
Château Changyu Moser XV 2017 proviene de los viñedos ubicados en el piedemonte oriental de Helan en la región de Ningxia. Su cosecha es manual, con selección de granos. Fermenta en pequeños tanques de 20 toneladas y luego el 70-80% del volumen fermenta en barricas de roble de segundo uso por 18-24 meses. Su crianza es de 6 meses en botella. Chateau Changyu Moser XV 2017 será comercializado en vinotecas a un precio sugerido de $40.000 la botella.
Ningxia – Terroir oriental
Ningxia es una de las regiones vitivinícolas más aclamadas por la crítica en China, ubicada en el centro-norte. Se hizo famosa después de la competencia de cata a ciegas “Bordeaux vs. Ningxia” que le dio a la región cuatro de las cinco mejores ubicaciones de vinos.
Ningxia es un valle de 150 km de largo irrigado por el río Amarillo en las estribaciones del cordón montañoso Helan. Aquí se elaboran diversos vinos con variedades de uva como Cabernet Sauvignon, Cabernet Gernischt y Chardonnay. Sus 38 000 hectáreas la convierten en la segunda región vinícola más grande de China. La mayoría de las 200 bodegas que se encuentran aquí trabajan viñedos en las estribaciones bajas de la montaña Helan.
El corto período vegetativo de Ningxia va seguido de un largo y frío invierno, por lo que las vides deben protegerse de las bajas temperaturas con un montículo de tierra amontonada alrededor de la base de la planta que actúa a modo de aislante.
Ningxia posee un clima totalmente continental. Sus viñedos se ubican a más de 1.200 metros sobre el nivel del mar, la intensa luz del sol se compensa con noches mucho más frescas. Este cambio de temperatura diurno y la falta de humedad en el aire, ayuda a ralentizar la maduración de las uvas, logrando un perfecto equilibrio entre fenoles y acidez.
La tierra de la base de la montaña Helan forma parte de la llanura aluvial del río Amarillo, y los suelos se han ido depositando con el tiempo por el material arrastrado desde las montañas. Estos suelos arenosos y guijarrosos son poco fértiles, lo que reduce el vigor y el rendimiento de la vid y da lugar a bayas más pequeñas y concentradas.
En 2013, Ningxia estableció su propia clasificación, que sigue el modelo de la Clasificación de Burdeos de 1855. Revisadas cada dos años, las mejores bodegas se dividen en “grados”. Actualmente, 35 bodegas están listadas en el sistema de clasificación regional.
Variedades – Cabernet Sauvignon, Cabernet Gernischt (también conocido como Carménère), Merlot y Marselan son las principales cepas cultivadas en China. En las primeras etapas del auge del vino chino, la influencia de Burdeos fue fundamental. La selección de variedades, las técnicas de vinificación e incluso las bodegas reflejaron la famosa región vinícola francesa.