Naranja, crujiente, dulce. Nació en el Mediterráneo y en el sudoeste de Asia. Presente en la dieta de griegos y romanos, fueron los árabes los que la introdujeron primero en España y el resto de Europa. Las hay moradas, amarillas y anaranjadas: su leyenda es improbable pero linda. Dice que los horticultores holandeses buscaron la mutación genética que dio a la zanahoria su color anaranjado para agradecerle al rey Guillermo I (de la Casa Real Orange-Nassau) la independencia de España. Sí es cierto que es rica en vitamina A, azúcares y pectina. También es buena para la vista y aporta potasio y fósforo. En Argentina se produce en Mendoza, Santiago del Estero, Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. Es el sexto vegetal preferido por los argentinos. Da gusto a estofados y guisos, y sorprende en tartas, budines y muffins.

¿Cuál es tu forma favorita de prepararla?